Domingo de la 23ª semana del Tiempo Ordinario

Este Domingo en el Evangelio se nos presenta el milagro de la curación del ciego y sordomudo.

Y, mirando al cielo, suspiró y le dijo: «Effetá», esto es: «Ábrete.» Y al momento se le abrieron los oídos, se le soltó la traba de la lengua y hablaba sin dificultad...(San Marcos 7,31-37)

¿Cuál es el mensaje que quiso Jesús darnos con este milagro? Al ser preguntado Rodrigo, nuestro hijo mayor de 4 años, el porqué hizo el milagro, respondía diciendo "porque él creía en Jesús."

Pudiera ser, pero la escena nos muestra al hombre, sobre el que se obra el milagro, sin realizar obra alguna conducente a su curación.

Creemos que el deseo de Jesús era el que la multitud que lo seguía creyese en Él y lo escuchase. El hombre era un testimonio de que Jesús era Dios, único en realizar tales tipos de milagros. Y ciertamente, ellos se dieron cuenta de que Jesús era alguien especial. A pesar de la prohibición de no mencionar nada empezaron a proclamar las maravillas que habían visto.

Para que los niños entiendan qué es una persona ciega hicimos una pequeña actividad con los niños. Les cubrimos con unas vendas en los ojos e hicimos que caminasen por casa de tal modo. Aunque quisiesen ver no podían y se dieron cuenta de cómo de difícil sería el realizar muchas cosas para una persona en dicho estado. Con esto aprendieron dos cosas: a empatizar algo con las personas que no pueden ver y lo segundo cuán grande sería la felicidad y el mismo hecho de volver a ver.

Jesus y El Milagro

Materiales:

Papel impreso- Aqui les comparto el link para imprimir: https://i3.wp.com/i.pinimg.com/originals/29/85/54/2985548eae2b93394b3adb19618e41e6.jpg (O si quieren pueden dibujar algo similar, así se les da a los niños más entretenimiento).
Tijeras
Lápices de colores

Proceso

Una vez impreso o dibujado dejamos que los niños coloreen a gusto.
Recortamos las ranuras en las líneas punteadas a la altura donde debieran estar los ojos.
Recortamos la forma entera del rectángulo que contiene los ojos cerrados, los ojos enlodados y los ojos abiertos.

Insertamos la forma rectangular por entre las ranuras mencionadas.

Este sería el resultado:

Y he aquí las distintas etapas: El hombre que no podía ver, el hombre cuando Jesús unta de barro sus ojos y el momento en el que abre sus ojos y finalmente pudo ver.

Algo realmente sencillo pero que deja impresa la idea general de lo que trata el Evangelio.